Revisa bien tu calendario y organízate
Cuando tengas un rato revisa tu calendario.
Hazlo mejor por la noche. Extrae de él las anotaciones que hayas tomado anteriormente: compromisos, llamadas a hacer, visitas, documentos que debas llevar contigo para realizar alguna gestión, y haz una lista. Céntrate sólo en el día siguiente.
Sé eficiente con tu tiempo. Es bueno tener en cuenta que si entre los lugares de dos citas del Calendario, por ejemplo, hay un negocio de copia de llaves y hace un tiempo
que debes hacer copia de una y nunca encuentras el momento, aprovecha para incorporar este nuevo recado. De todas formas, preve entonces el tiempo adicional que necesitarás.
Lista las obligaciones personales y profesionales juntas o por separado, según te vaya mejor.
Al día siguiente, por la mañana, vuelve a darle un vistazo para recordar lo que necesitas llevar contigo desde primera hora, a fin de que todo vaya sobre ruedas en el transcurso del día. Y sé realista: si revisando la lista ves que a algo no llegarás a tiempo, avisa lo antes posible por teléfono para retrasar un poco el encuentro o si puede ser, pasar la cita a otra fecha.
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