Puntualidad

Hay muchas razones por las que ser puntual es un buen hábito:

• Demuestras respeto por la persona con la que quedas. 
• Reduces tu nivel de estrés.
• Aseguras que no olvidas cosas importantes que tienes que hacer.
• Dejas una buena impresión en los demás y pueden confiar en ti.
• Hacer las cosas con tiempo te deja espacio para asegurar los pequeños detalles.

Vamos a imaginar que eres de los que siempre llega tarde y te has propuesto que esto no vuelva a pasar. ¿Qué debes hacer para evitarlo?

• Se realista. La característica fundamental de las personas puntuales es que son realistas con lo que se tarda en hacer algo. Dejan tiempo suficiente. Nada de “¡Eso se hace en dos minutos!” cuando de sobra saben que al menos se tarda 10. No subestimes lo que tardas en ducharte, en vestirte o en desayunar. También se realista con lo que tardas en llegar a los sitios. Si siempre antes tardabas 20 minutos en llegar a trabajar y ahora son 35 no sigas pensando que son 20 y que llegas tarde no sabes ni por qué. Ajusta los tiempos en tu mente.

• Empieza por definir la hora exacta a la que debes llegar a cada lugar e intenta siempre dejar un margen. Si tienes que estar a las 9:00 planifica para estar a las 8:45 u 8:50. 
• De ahí calculamos hacia atrás el tiempo total (incluyendo ese margen) sabiendo todo to que debes hacer en ese intervalo.
• Define todas esas cosas que debes hacer hasta que llegas a tu cita. Las personas vivimos gracias a nuestros hábitos. Todo lo solemos hacer por rutinas de forma semi automática. Si eres organizado y todas tus rutinas están estructuradas serás mucho más puntual.

• Ten en cuenta los imprevistos que puedan surgir y anticípate a ellos (tráfico, perderse a pesar del gps, un niño que se pone enfermo, echar gasolina en el coche, despertador que no suena o que apagas y te vuelves a dormir, metro que no llega puntual, te olvidas algo en casa y tienes que volver, llueve y hay más tráfico de lo normal, etc.)
• Sal siempre 5 ó 10 minutos antes de la hora en que debas estar en marcha. La persona puntual también sabe que se tarda en ¡llegar al coche, arrancar, salir del garaje y llegar a la carretera!
• Si llegas antes de tiempo, que suele ser el caso de la gente puntual, aprovecha para hacer alguna cosa que tengas pendiente: contestar un mensaje, responder a un email, hacer una llamada corta, o simplemente disfrutar de ese ratito de tranquilidad o leer un par de páginas en tu e-book. Lleva siempre contigo algo con lo que matar esos ratitos y aprovéchalos. Hará que llegues a tu cita sin ni una pizca de estrés. 

• Levántate en cuanto suena el despertador. No te hagas el remolón.
• Adelanta tu reloj 5 minutos. Aunque sepas que está adelantado te dará siempre la sensación de que es más tarde de los que en realidad es.
• No incluyas demasiadas tareas en tus rutinas. A lo mejor llegas tarde a los sitios porque intentas hacer demasiadas cosas.
• Si llegas tarde porque no sabes ni qué hora es rodéate de elementos en los que veas la hora: el horno, el DVD, tu reloj, el ordenador, tu teléfono, la máquina de café, un reloj de pared o ponte alarmas que te recuerden la hora que es.
• Hazte con nuestro inseparable Time-timer para marcarte los tiempos. 

Los niños deben estar en el cole a las 8:55 porque empiezan a las 9:00 (mejor que tengan un ratito para que no vayan los pobres con la lengua fuera). Si yo no soy puntual a ellos les afectará enormemente. 

Si esa es la hora a la que deben llegar entonces mi objetivo deberá ser estar allí a las 8:45. Eso me da un pequeño margen para imprevistos (cuantas veces se habrán dejado una tarea que debían entregar o la merienda ...).

Ahora contamos hacia atrás y vemos cuanto tiempo necesito para estar en el colegio a las 8:45.

• Debo estar en el coche a las 8:25 porque tardo una media de 20 minutos en llegar contando con el tráfico.
• Debo salir de casa a las 8:20 para bajar al garaje y salir.
• Deben, los niños, empezar a vestirse y arreglarse, además de hacer su cuarto y su cama, a las 7:50 porque suelen tardar una media hora en hacerlo todo.
• Deben empezar a desayunar a las 7:20 porque suelen tomarse su tiempo para desayunar. Así que debo despertarles a esa hora.
• A mi me gusta estar lista cuando les despierto para centrarme en ellos por las mañanas. Así que yo debo estar lista a las 7:20. 
• Para ello debo despertarme a las 6:20 y tener tiempo de tomarme un café tranquilamente, ver las noticias y arreglarme. También sé que si me toca lavarme el pelo y secármelo ese día debo levantarme a las 6 porque tardo 20 minutos de más. Además, estaré lista si tengo: la ropa preparada la noche anterior, mi bolso listo con todo lo necesario dentro incluida mi agenda y teléfono cargado, café programado para tomarlo nada más despertarme.

Cuando sigo esta rutina, los niños llegan a su hora al colegio y yo a tiempo al trabajo.

Hasta la persona más puntual puede llegar alguna vez tarde. Muchas cosas pueden suceder. Pero puedes evitar sentirte estresado o quedar mal con la gente. 

• Si la persona ya te está esperando y son 10 minutos  llama por teléfono y avisa  que vas a llegar tarde pero que estás de camino explicando lo que ha sucedido.
• Si es con bastante tiempo cancela la cita  y ponla para otro día.
• Si es al colegio de los niños, poco puedes hacer ... les marcarán un retraso pero escribe siempre una nota para el tutor y que sepa que no es culpa del niño.
• Si es a una fiesta o lugar en el que no vas a hacer esperar a una persona en concreto, envía un mensaje igualmente al que lo organiza. Igual no se da cuenta de tu retraso entre tanto follón, pero tu quedarás como una persona educada y seria.

Pero siempre, siempre avisa que vas a llegar tarde sea de la manera que sea. 

• Reconoce si tienes problemas para ser puntual y ponle remedio.
• Intenta ver como tu impuntualidad afecta a los demás. ¿Qué sientes tú cuando te hacen esperar?  Esto puede hacerte reflexionar y motivarte para mejorar.
• Considera la puntualidad un valor tan importante como la honestidad y la integridad. Lo es. Cuando fallas constantemente en esto tu reputación disminuirá e incluso afectará a tu amistad con muchas personas.